domingo, 24 de marzo de 2013

Mientras viva y cuando muera

A mi familia y amigos....

Comienzo explicando qué es esto y porqué lo escribo.

No es para asustarlos, para que me regañen, crean que estoy loca o se entristezcan. Es para prepararlos. Para prepararnos...

Esto que leerán aquí será como un testamento de lo que deseo que hagan si me voy un día, repentinamente, sin poder despedirme.

Quiero que sepan cómo viví mi vida, cómo era y cómo pensaba, que sepan lo que pienso, cómo pienso, lo que hago y lo que será. Para que ustedes mis amigos lo hagan también.

Después de vivir la pérdida de un ser querido tan cercano y ver como otros sorpresivamente se van sin importar la edad, he pensado mucho acerca de la muerte. ¡No hay que temerle! Hay que recibirla con aceptación, lo que debemos hacer mientras llega es valorar la vida, valorar y agradecer por cada segundo, cada momento bueno y malo, cada día de sol, de lluvia, de frío y de calor. Cuando lloramos, cuando reímos, cuando nos mojamos ¡o nos quemamos! Cuando sentimos, cada sensación de nuestro cuerpo, interna y externa, siéntela, vívela, disfrútala. ¡Estás vivo!

Debemos vivir, ¡vivir intensamente! Yo sé que hay personas que me dicen que estoy loca, que soy una intensa, que esto, que lo otro. ¿Pero saben qué? Tal vez esté disfrutándola más que ellos.

No te arrepientas de nada de lo que hagas, arrepiéntete de no haber intentado, de no haber dicho o hecho algo. Nunca tengas miedo, equivócate ¡no importa! pero aprende de tus errores. ¡Arriesga! Te sentirás más satisfecho contigo mismo.

¡Sonríe todo el tiempo! Las sonrisas no cuestan, sin embargo alegras tu día y el de los demás. ¡Ríe a carcajadas! que te duela el estómago, llora de risa. Es el mejor des estrés y es bueno para la salud. No te preocupes tanto, todo tiene solución, menos la muerte. Nunca te rindas, ¡jamás! Lucha por tus sueños, tus metas, mantén tus ideas firmes.

Llora. No retengas jamás tus sentimientos, siempre desahoga tus enojos, tristezas, alegrías, preocupaciones; siempre habrá alguien que estará ahí para escucharte, apoyarte y aconsejarte.

Escucha. Hazlo así como quisieras ser escuchado, sobre todo a los viejos, ¡no sabes cuánto conocimiento tienen por aportar!

Trata como quieres ser tratado. Sé cordial con todo aquél que te rodea, todos merecen respeto, incluso con los que crees que no lo merecen, hazlo por ti, para estar en paz contigo.

¡Que no te de pena nada! Baila, canta, grita; vístete y péinate como quieras, que no te importe lo que piensan los demás, siempre sé tú mismo, sé auténtico. No trates de agradar a los demás siendo alguien que no eres, cuando menos lo esperes alguien te conocerá profundamente y le encantará tu forma de ser (dicen que siempre hay un roto para un descosido tanto en amistades como en pareja).

No reprimas nada. ¡Date el gusto! Prueba todo lo que te guste y te llame la atención, eso sí, cuídate de los excesos si quieres una larga y sana vida. 'Come frutas y verduras'.

Ama intensamente. Entrégate completamente, confía, cree, pero siempre date a respetar, valorar y recuerda que deben darte tu lugar. Jamás dejes que te pisoteen, te maltraten ni te hagan ningún mal. Si te hace llorar más de lo que te hace reír, no vale la pena.

Perdona. Nunca guardes rencor a nadie por más mal que te haya hecho, pues prisionero serás por siempre en tu corazón si no perdonas. Eso sí, nunca vuelvas a cometer los mismos errores, ni vuelvas con la persona que tanto daño te hizo, perdona y deja ir. Sí, todos merecemos una segunda oportunidad, pero si a la segunda volvió a hacerlo, lo hará de nuevo a la tercera, cuarta, quinta, sexta... ¡piénsalo!

Disfruta a tu familia y seres queridos; a tus padres, hermanos, abuelos, tíos, primos, amigos. No sabes cuando ya no podrás volver a estar con ellos.

Mantén contacto con tus amigos, aunque estén lejos y no los puedas ver, que sepan que no te olvidas de ellos; una llamada, un mensaje de vez en cuando para mantenerte al tanto de sus vidas, después no te quejes de que nadie se acuerda de ti.

Nunca te vayas a dormir enojado con alguien, de verdad ¡jamás! Tal vez no lo vuelvas a ver para perdonar o pedir perdón.

Recuerda que todo pasa por alguna razón. Dios sabe porqué hace las cosas de esa manera y en ese momento. A veces tiene que pasar lo peor para que venga lo mejor, pasamos por cosas difíciles que nos preparan para ser más fuertes y poder sobrepasar lo que viene, nos pone en caminos y con personas que necesitamos en ese momento y luego tal vez cambien o se vayan, porque ya cumplieron con su tarea en tu vida.

Seamos altruistas por favor, pensemos en los demás, pongámonos en sus zapatos. Ayudemos siempre en la cosa más mínima que podamos a nuestro prójimo. Sino somos nosotros ¿quién? ¡El mundo nos necesita!

Disfruten la naturaleza cada que puedan. Deténganse un momento todos los días para admirar la pequeña flor que acaba de nacer, el pájaro que canta todas las mañanas, la lluvia, como reverdece todo después de ella; los colores de cada atardecer, los rayos del sol, y si te levantas temprano no te malhumores, disfruta cada amanecer, las nubes del cielo, las estrellas y la luna. La luna... ¡Mi luna tan bella siempre! Todos los días nos regalan paisajes tan hermosos ¡y no los vemos! Abracen a los árboles como yo que hasta los beso. Hablen con las plantas, los animales, ¡ámenlos! Caminen descalzos de vez en cuando, sientan la tierra, el piso, el frío y el calor, el agua. Salgan a mojarse cuando llueva, jueguen como niños. ¡Nunca dejemos de ser niños!

Haz una lista de todo lo que deseas hacer antes de morir y trata de cumplirla, pasa el tiempo y vamos dejando atrás nuestros sueños. No esperes a que te digan que te quedan tantos días de vida, hoy estamos, mañana no sabemos.

Créanme que si lo analizamos y lo hacemos de verdad, no importa por lo que pasemos, no importa lo difícil que pueda ser la vida, nosotros la haremos más sencilla y la disfrutaremos al máximo hasta el final.

Ahora, si morimos, ¿porqué llorar? ¡porqué estar triste! Yo estoy comenzando a vivir mi vida así y lo haré hasta que me vaya, así cuando me vaya, podrán decir, ¡VIVIÓ! VIVIÓ AL MÁXIMO CADA DÍA Y SE FUE TRANQUILA...

Claro hay cosas que quiero hacer antes de irme como conocer Londres, y muchos lugares de Europa y el mundo. Quiero estar en unas Olimpiadas, en la inauguración y las competencias de Taekwondo. Quiero convertirme en escritora y escribir buenos libros. Quiero cantar y escribir mis propias letras y llegar a todas las personas posibles con mi música, compartir este sentimiento. Tener un compañero que camine junto a mí por la vida, formar un hogar propio. Quiero hacer que las personas me recuerden por mi alegría, mi energía y mis locuras, dejar huella en sus corazones.

El día que me vaya amigos, no vistan de negro ni un sólo día, vistan de mis colores favoritos, morado, azul rey o eléctrico, rojo. Que el lugar se llene de energía positiva, de risas y pláticas alegres, de anécdotas y recuerdos bellos. Que yo haya sido el pretexto perfecto para que todos se junten y muchos se vuelvan a ver después de un buen tiempo.

Mis cosas. ¿Qué hacer con mis cosas? Tengo una caja llena de diarios, hojas sueltas, libretas y cartas desde que tengo 9 años de edad, algunas cosas que escribí son ridículas y probablemente me avergonzaría que las leyeran, pero son mis memorias, mis recuerdos, mis pensamientos, mis experiencias. Se las heredo a mis hijos (si llego a tener) para que me conozcan mejor que nadie en el mundo. Sino tengo, a la persona más cercana a mí en ese momento, mi pareja, mi familia, mi mejor amiga(o). Familia. Mi ropa y mis cosas por favor no las guarden por aprehensión, ni peleen por ellas, dónenlas a quien más las necesite y quédense con las cosas que les sea útil. Recuérdenme con las fotos, cartas y diarios, mis películas, esas cosas que tanto me gustaban pero no le sirven a nadie más.  
Mi cuerpo. El cuerpo sólo es el recipiente del alma, cuando el alma se va el recipiente queda vacío, por lo que no sirve ya de mucho, no le lloren a mi cuerpo, ya no estoy ahí. Si mis órganos son funcionales y le ayudan a alguien que así sea. ¿Podrían incinerarme y liberar mis cenizas en una noche de Luna llena de otoño, a la cima de una montaña por favor? El otoño es mi estación del año favorita, y las lunas llenas de otoño son las más bellas. Ahí es a donde creo que iré cuando me vaya, a la Luna, finalmente iré a vivir a mi otro hogar.

Si me hacen una misa, ¿podrían tocar el Requiem de Mozart? ¡Eso sería genial!

Cuando vean la luna llena siempre recuérdenme, ahí estaré con ustedes viéndolos y sonriendo como siempre lo he hecho.

Recuerden sólo una cosa mis amigos, 'la materia no se crea ni se destruye sólo se transforma', y nosotros no morimos, sólo nos transformamos. La muerte no es el fin, sólo es un nuevo comienzo, es solo que vamos a una nueva dimensión donde no necesitamos más el cuerpo físico, sólo nuestra alma. Por eso cuídenla, porque es lo único que nos llevaremos a la otra vida. 


¡¡¡LOS QUIERO!!!

DESPIERTA

Toda la vida me han inculcado valores, ética, rectitud, educación, moral. Pero sobre todo lo que la sociedad me ha enseñado, es el camino que debo seguir, cómo debe ser mi vida, qué hacer, cómo hacerlo, cuándo hacerlo...

Crecí con esa ideología, crecí creyendo fielmente en ello, y en qué así sería mi vida. Que estudiaría al menos hasta la Universidad, que no debía tener novio hasta mayor de edad, que hay ciertos trabajos que no son adecuados para una mujer, que debo atender la casa, a mi padre y al esposo. Que debo casarme después de graduarme, pero debo casarme joven pues si no sería una vieja solterona. Qué debo hacerlo a través de la iglesia. Casarse, debo casarme. ¿Porqué es tan importante eso para la sociedad? 

Que debo de ser femenina, debo vestirme de cierta forma, comportarme de cierta forma, hablar de cierta forma, que debo ser niña "bien". Que debo buscar desarrollarme en cierto ambiente, con cierta gente, mantener un "estatus social". ¿Porqué la distinción de clases sociales?

La realidad es que hasta hace muy poco me estaba dejando llevar como borrego por todo eso. A pesar de que no siempre estaba del todo conforme. Y la verdad es que siempre he sido diferente. Va pasando el tiempo, voy dándome cuenta de muchas cosas. He llegado a la conclusión de que para todo hay un balance. Y eso es lo que trato de hacer ahora, balancear mi vida.

Definitivamente debemos seguir ciertas normas y reglas para poder convivir en una sociedad. Sin embargo, hay reglas muy tontas que impone la sociedad que definitivamente pueden romperse, y hay maneras de lograr ser tú mismo sin afectar a los demás. Para eso se nos otorgó también libertad, y a veces no hacemos uso adecuado de ella. Unos se limitan y otros abusan. 

Siempre he creído que soy diferente, que soy única, que estoy loca. Sí. Mucha gente me lo ha dicho, y lo reitero. Pero, ¿quiénes están más locos?, los que hacen lo que desean y no lo que les dicen, o los que viven como zombies, estos muertos vivientes, que sólo caminan por caminar, hablan por hablar, no tienen motivación, no tienen una meta, no tienen vida propia. Títeres. Eso somos. Títeres de la sociedad, de la política, de la religión, de todos los que tienen poder y quieren controlarnos, ¡y no dejarnos DESPERTAR!



Yo decidí abrir los ojos un día. Y me di cuenta de lo maravillosa que es la vida. De lo poderosos que somos. De todo lo que somos capaces de hacer y no sabemos.

Alguien me enseñó. Que soy un ser ilimitado. Que tengo el poder de lograr lo que me proponga, que puedo ser lo que desee y llegar a donde desee. Que debo criticar todo lo que escuche y vea, debo hacerme preguntas de todo y buscar las respuestas. La verdad, es la que a ti te parezca como verdad. Así como lo que está bien y lo que está mal.

Yo decidí arriesgarme. Vivir cada minuto y segundo de mi vida como si fuera el último. Disfrutar de todo lo que me pasa. Lo bueno, lo malo. Doy gracias por lo que me sucede y lo que aún no. Creo en el destino. Creo que hay un Dios, un Creador, un Arquitecto de la creación. Pero también creo que la religión nos ha mentido, y de la misma manera nos ha querido controlar. Creo que hay posibilidades de otro origen, y creo que todo en esta vida es posible. Creo en extraterrestres, hadas y duendes, creo que existe la magia, la ciencia y que todos nosotros nacimos con poderes que no conocemos. Unos nacen con algunos más desarrollados, otros no. Pero todos podemos hacerlo.

Así que decidí vivir la vida creyendo en todo y en nada. Porque todo a la vez se cuestiona. Decidí vivir intensamente, no importa lo que digan los demás de mí.  No importa lo que piensen y cuánto me critiquen.

Me lancé a la aventura de la vida. Es corta. No se vive dos veces, cada momento, cada oportunidad hay que tomarla, si no arriesgo, ¡entonces que gano! Sé que a veces tengo mucho que perder, pero no me importa, voy a arriesgarme por lo que crea que puede valer la pena vivir. Porque la experiencia nadie te la va a quitar. No importa cuántos bienes tengas. No te quedes con nada porque nada te llevarás. Lo que sí tendrás hasta el último respiro, serán los recuerdos de una vida. Las risas, las lágrimas, el viento, la lluvia, el sol, la luna.... Cuántas estrellas conté. El ridículo que hice aquel día y como me reí junto a los demás de mis locuras. Cuando amé y me dejaron, cuando me amaron y lo dejé ir. Cuando viajé y conocí mil lugares. La música que me hizo llorar. Las películas que me hicieron reír. Los problemas que me hicieron madurar. Las lecciones que tuve que aprender. ¡Cuántos errores tuve que cometer! Los amigos que hice. Lo mucho que amé sin que me importara si me correspondían. Todo lo que le entregué al mundo y que a cambio recibí sonrisas, agradecimientos, a veces el simple placer de saber que lo había hecho. Eso, eso es lo que me quiero llevar conmigo... Esos recuerdos, esa vida.

Se vale soñar, se vale creer, se vale luchar, todo se puede lograr. Sólo es cuestión de creer en nosotros mismos, proponernos las cosas, ser firme en nuestras decisiones, ser constantes y tercos y no dejar que nadie nos diga que no podemos, que nada nos detenga.

Que nadie te diga lo que mereces y lo que no, lo que puedes y no puedes tener, o hacer. Somos capaces de crear nuestro propio destino. Somos capaces de crear las cosas más maravillosas, sólo hay que creerlo. Cambia tu forma de pensar, de vivir, de ver las cosas!!



¡¡¡¡ DESPIERTA !!!!